EN ESTE EJERCICIO
Diario del cineasta autorreflexivo
Piensa en ello como una forma de convertir tu vida en un guión, momento a momento. Al final de cada semana, tómate un momento para reflexionar: ¿qué es lo que más te ha llamado la atención? ¿Ha habido alguna conversación que se te haya quedado grabada? ¿Te has fijado en un detalle pequeño y bonito? ¿Un reto que hayas superado? Ahora, escríbelo como una escena corta, contigo mismo como protagonista. Sé sincero. No tiene por qué ser dramática, a veces los momentos más pequeños son los que crean las mejores historias".
Cómo ayuda
Este ejercicio te ayudará a encontrar tu voz personal como narrador y te entrenará para ver la vida a través de una lente cinematográfica. Mejorarás a la hora de captar emociones, perfeccionar tus guiones y reconocer los pequeños detalles que hacen que una escena cobre vida.
¿Con qué frecuencia?
Intenta hacerlo una vez a la semana. Es suficiente para mantener la constancia sin sentirse abrumado.
¿Quieres ir más lejos?
Después de escribir tu escena, piensa cómo la dirigirías. ¿Qué ángulos de cámara utilizarías? ¿Cómo la iluminarías? ¿Qué música sonaría de fondo? Quizá algún día conviertas una de estas anotaciones en un cortometraje.